¿Y si todo en lo que creías resulta de repente vacío? Durante años, Kishan* buscó la paz en la meditación y los mantras. Un vacío creciente acaba por conducirle tras la pista de Jesucristo.
En otoño de 2023, Kishan* entra en la iglesia. Busca y mira a su alrededor incómodo. En Keizerswaard, un evangelista le habló y le instó a visitar la iglesia. Desde ese día, asiste fielmente a las celebraciones.
Desde niño, Kishan se arrodillaba por las mañanas ante su altar. Durante al menos una hora, meditaba pronunciando los mantras necesarios, haciendo que las fuerzas fluyeran hacia su cuerpo. De vez en cuando, un gurú se quedaba con él para realizar ritos especiales. Durante años, Kishan encontró la paz de este modo. Pero la última vez que un gurú visitó su casa, la visita acabó en decepción. Tras la marcha del gurú, Kishan se sintió vacío, desilusionado. ¿Había dedicado su vida a esto? Comenzó una búsqueda de la verdad.
Milagrosamente, algún tiempo después, su hijo regresa de alta mar con un mensaje especial: en el camino, se ha encontrado con cristianos Y ha sido bautizado. Su hijo insta a Kishan a ir en busca de Jesucristo.
Duda, hasta el día en que entabla conversación con un evangelista de Keizerswaard. En la primavera de 2024, asiste al curso Alpha.
El fin de semana de acompañamiento incluye mucho tiempo para la oración. ¿Por qué rezo? Kishan sólo tiene un deseo: 'Quiero conocer la verdad y dedicarme a ella'.
Se reza en el acto, pero también en el tiempo posterior. Tres meses después del fin de semana Alfa, se dirige al párroco de la iglesia: 'Quiero desprenderme de mi altar'. Sigue dudando qué hacer con todas sus estatuas. Algún tiempo después, está más decidido: quiere bautizarse y eliminar definitivamente las imágenes de su vida.
Sorprendentemente, Kishan no se limita a dar a Jesús un lugar entre sus otros dioses, sino que quiere romper con el pasado y dedicarse por completo a Jesucristo como su Señor. En diciembre de 2024, hay lugar para el "ministerio de liberación". Será una sesión feroz. Al final, Kishan rompe las imágenes con un hacha. Por último, recoge un libro de escrituras védicas. El libro ha pasado de padre a hijo, pero él le pone el hacha. Finalmente, parece aliviado. La casa está
Unos días después, se sumerge de cabeza en las aguas del bautismo para resucitar a una nueva vida con Jesucristo.
*Nombre real conocido por los editores.