Hay diferentes maneras en las que usted, como iglesia, puede participar en la Oración por el Prójimo. Cada iglesia puede elegir la que mejor se adapte a su propio contexto.
1. Informar y distribuir
La forma más sencilla de participar es llamar la atención sobre la semana de oración en la congregación durante el servicio del domingo por la mañana y repartir libros de oraciones a la salida de la iglesia.
Otras opciones son anunciar la semana de oración durante los anuncios (preferiblemente con bastante antelación), a través del boletín de noticias, el boletín de la iglesia o la aplicación de la iglesia.
También se proyectará un vídeo promocional durante el servicio.
2. Organización de reuniones de oración
El compromiso en la semana de oración puede profundizarse organizando una reunión de oración como congregación. Puede tener lugar físicamente o en línea. Durante esta reunión, por ejemplo, se puede rezar juntos una de las oraciones del folleto de oración. Véase también el recurso Rezar juntos.
3. Servicio dominical en torno al tema
El domingo en que comienza la semana de oración puede dedicarse a la oración y al compromiso con el prójimo. Considere un sermón sobre este tema y/o un momento de oración durante el servicio, por ejemplo rezando por los vecinos en pequeños grupos o en plenario. Véase también el recurso Esquema del sermón.
4. Organización del Día del Vecino
Como iglesia, puedes optar por organizar tu propio día del barrio en el edificio de la iglesia y sus alrededores. Asimismo, los miembros de la iglesia que vivan cerca pueden organizar conjuntamente algo en su propio barrio.
5. Clausura y testimonios
El domingo siguiente a la semana de oración puede aprovecharse para echar la vista atrás. Los miembros de la iglesia pueden compartir experiencias o testimonios sobre lo vivido durante la semana. También dentro de los círculos pueden debatir cómo quieren seguir implicándose en la oración con sus vecinos.
6. Conexión con el tema o visión anual
Rezar por el prójimo también puede vincularse a un tema anual existente o a la misión y visión de la congregación. Por ejemplo: "Creemos que es importante implicarnos en nuestra ciudad y en nuestro barrio a través de la oración. La participación en la Oración por el Prójimo es una de las formas que tenemos de hacerlo".
7. Semana de oración a finales de año
Como iglesia, puede que la semana de oración a finales de septiembre (después del Día Nacional del Vecino) no encaje bien en su calendario. Por supuesto, siempre es posible situar la semana más adelante en el año.